lunes, 9 de noviembre de 2015

Yo,
he vivido en las sombras,
en la ciudad borrosa,
mendigando,
buscando
en la penumbra
de camas sucias sin manta,
amarillentas.


Yo
he estado despierto dos años,
hablando con lobos mudos,
asustado
vendado,
negándome,
recordando,
perdido.

Yo,
he cargado con el peso,
conviviendo con el adiós
con tu marcha,
confuso,
en lo terrenal
de mis piernas,
mordidas.

Yo,
he descendido a lo mundano,
queriéndote en otros
en fantasías de plomo
donde no conocía a nadie
y me robaban las llaves,
todas las noches,
duendes.

Yo,
ahora que no soy yo
u otro yo,
raquítico,
he vacíado mi mente
matado mi semen
y llegado a la verdad
o mentira.


Yo,
no dejes que sea yo,
mátame
reclama tu trono de araña
o quémalo
pero no hagas ruido,
duermo.


Yo,
ahora lo sé
y vienen los jinetes,
reclamando mi vuelta
al nido
para curarme de ser yo
y alejarme
de ti.





lunes, 12 de octubre de 2015

La salvación no está en nadie,
ni en ti,
ni en todas esas caras,
robadas por un rato
y prostituídas.
Una fuerza redentora
de autosugestión
de autodolor
esculpida entre aŕboles,
se disculpa.
Es así,
así será,
contigo o sin ti
asúmelo.

Puedes cerrar los ojos,
taparte los oídos
o cortarte la lengua;
pero el muro seguirá.
Puedes intentar escapar por las cloacas,
besar a las ratas,
hacerte amigo de los mutantes,
pero el laberinto seguirá.

Padre nuestro, 
bendice nuestro pan,
hágase tu voluntad,
no nos dejes perdidos 
y gracias por otro nuevo día.
Resuena una y otra vez, 
esa oración
mientras la distorsión invade
y deja desnudo,
en la cama
con un mensaje de texto,
sin respuesta.

Y me encuentro clavado,
al suelo,
al vientre que lo derrumbó,
al camino fácil.
Una y otra vez,
repitiendo,
esculpiendo en la mentira,
caminando y comiendo solo,
teniendo mi merecido,
bailando en el patíbulo.

sábado, 19 de septiembre de 2015

Corazón verde, cruz roja, cruz roja, cruz roja, corazón verde. 

Pregúntame con ese cuestionario para sacar vísceras que no te pertenecen. No está bien decir en la segunda frase que Polonia es un país que sobra, que me declaro fan de las galletas con cicuta. No obstante todos los que estamos aquí pertenecemos a ciudades desoladas y pretendemos ser violentados una y otra vez. No tengo tiempo para responder a todos, de ser selectivo, de pensar. Desistí en dar una coherencia firme con nexos a los habitantes de este sitio, de encontrarme. Joder, si cuando trato de descifrar cuales de mis múltiples yo es el verdadero termino teniendo un ataque de epilepsia y soltando semen hasta por la boca. Jamás podré frenar. No quiero seguir deslizando. Me aburro. Vuelvo a deslizar. ¿Pasará? ¿Seré yo? 

Corazón verde, cruz roja, cruz roja, cruz roja, corazón verde. 

La herida se transforma en un dedo mutante que conecta directamente con el cerebelo y descoordina mis acciones motoras. No puedo parar. Yo no soy el que decido, nadie decide. Podría estar hablando un rato con Faulkner, pero decidí castigarlo hasta que en otra vida me reencarne en un ser impoluto. La cadena de traiciones tiene que seguir. Soy eso o  aquello. Te veo, tú no. Volveré al punto de inicio, como siempre. Nadie llorará, pues de lo contrario sería una conversación de sordos. Sé que es lo que quieres. Las cifras tienen que aumentar para que pueda ser más guapo, lo sabes. 

Corazón verde, cruz roja, cruz roja, cruz roja, corazón verde. 

Realmente no puedo amar. Ojalá pudiera. La soledad es demasiado confusa, un simple número para contar en las múltiples masturbaciones. Cuando salga todo a la luz me volverás a encontrar en el bosque de acacias.

sábado, 12 de septiembre de 2015


No me acuerdo de tu nombre, 
me sudan las manos,
usas frases largas, 
perdí la concentración. 

No me acuerdo de la ubicación, 
ni si llegué yo tarde
o tú.
Fue un delito simular Francia,
era un pueblo de mala muerte,
no teníamos brújula.

No sé si quiero acordarme
de tus sellos en la mano,
del significado de "filatelia".
Olvidé tus palabras indescifrables, 
tú tienes la culpa,
solo tú. 

No me acordaré jamás,
de tus mentiras, 
de las mías,
ni si tocabas tú la guitarra
o yo.

Algún día te acordarás de mi,
de mis rizos por la mañana,
de mis soliloquios musicales
de mis manos temblando,
de mis cantos desafinados.
Algún día me llamarás
y habré cambiado de nombre.


miércoles, 15 de julio de 2015

La mayoría de problemas que tengo no existen.
Algunas de mis figuras retóricas te hablarán de rasgar cal de la pared.
Otras  solo son alteregos copiados de algún libro.
Otras espiritualidad,
yoga,
sabiduría
y dardos envenenados.
Otras dramas bajo lupa.
Ninguna de ellas os dirá mis neurotransmisores,
lo que sé de sinapsis
o la cirugía que puso de gala mis neuronas.

Veréis un yo problemático,
abusaréis del psicoanálisis,
os devorarán los escarabajos.
Aún así vuestro afán será mayor,
el altruísmo se deformará
y ni siquiera os ayudaréis a vosotros mismos.

Os diré mi secreto:
soy el Santo Mesías,
vine a salvaros,
a comerme vuestros gatos,
deshacer la geometría
y provocar vuestra autolísis.

Os araño,
me arañáis,
maullo,
quebráis,
lo siento,
amén.

lunes, 11 de mayo de 2015


Apúntate al juego.
En tus ojos:
el vacío.

Apúntate,
sufre un rato,
trata de descifrar,
frústate,
habla,
tu voz es interesante,
tus pensamientos más aún.

Apúntate,
kilos de ácido sulfúrico
te desfigurarán la cara.

Apúntate,
está de moda,
no la barba,
si no tu muerte.

Apúntate,
hay oferta
de estupideces,
de irrelevancia,
de ti.


sábado, 11 de abril de 2015

Es un cohete. Shock inicial tras el giro alrededor de la tierra. En esa silla de rueda metálica siempre tendrás el control del mundo. Cuando te quedes sin gasolina tratarás de emular esa foto del desnudo que nunca llegó. El verano vestido y en soledad siempre se repite. Pero tras las jubilación será peor y uno o dos planetas estarán desocupados. No los ocupes, es aburrido.

Quizás mires el suelo y vuelvas a dormir de nuevo en él. Tantas veces has/he maldecido que las primeras y terceras personas se mezclan en esta (nuestra) historia de insomnnio. No hay un genio dentro de ti.  ¿O quise decir dentro de mi? Aunque puedes seguir disimulando de que hay fines médicos en esas exploraciones a fondo. VETE. Mentira me voy yo en breve. Fotos de ti desnudo como recuerdo ¿o mías? MIERDA, ME HE VUELTO A CONFUNDIR. Todo el mundo se está besando. ¿A qué no te acordabas de eso?  He puesto ese aforismo en un contexto que no era el original (en realidad es el original).

Siempre queda internet y sus turbios brazos. Siempre queda fingir una profundidad espacial que no te corresponde. Siempre queda el piloto automático en tus palabras. Siempre quedan esos datos sin fondo. Siempre queda arrancarte la cara y ofrecérserla a los monos. Siempre queda el desayuno que no desayunas y la comida que se va en cafés. Siempre queda dudar sobre trastornos. Siempre queda el recuerdo de la ciudad romana. Siempre queda...

BLAH, BLAH, BLAH. No eres capaz de plasmar la imagen, no sabes de pintura. YO TAMPOCO SÉ. Es un  juego dialéctico cuyo resumen es:

-¿Cómo fue el día?
-Bien (mal)
-¿Estudiastes mucho?
-Sí (no)
-Mañana me pones los zapatos
-Ok

Hay muchas verdades en nuestras mentiras rutinarias. Si algo tenemos en común es que nos quemaremos por el fóforo blanco secretado por nuestro páncreas.

martes, 3 de marzo de 2015

Ella:

Diecisiete años:
el lomo del mundo en tus costados, 
la fe pagana, 
los libros inversos de Camus,
ovarios tirados a la basura,
educación de costras,
sonrisa quemada,
tu propio yo en tres piezas. 

Las consecuencias:
parar eternamente,
aguantar,
luchar por ellos
bañarse en benzodiazepinas.
Pero no temas,
esos días están enterrándose,
con lotes de medicamentos genéricos,
papeles de divorcio
y pubertad de instituto. 
En esta encruzijada podrás escapar,
reclamar tu soledad.

Él:

Jamás podré pagar la deuda,
anular la conciencia,
no sentir tu dolor y cadenas
o devolverte a tu tierra. 
¿Soy yo o eres tú?
esa duda metafísica me aborda siempre, 
cuando subo en el metro,
cuando pido mi comida,
cuando me pongo el preservativo,
cuando invento un mito,
cuando te miro.

Ya me voy,
tengo un molde de pasteles con cianuro,
para todo desaprensivo que te roze
o te ofrezca un cuarto fragmento de yo. 

Ya me voy,
gracias por todo.


viernes, 27 de febrero de 2015


-1-

Calla, no me mires fijo,
quizás  asperger, 
quizás TDAH, 
quizás normal.

¿Tienes dedos?
dime si  sabes sacarte los huesos de ellos,
necesito evadir  la llamada.

-2-

Miedo a que grites mi nombre,
no quiero tu cobre 

-3-

La herida se difumina,
¡aguanta teléfono!

-4-

Cuando sea dueño de mi:
viviré en Alaska, 
seguiré engatusando
y olvidando mi genética

-5-

Se  cruzaron buenas personas,
todas ellas están muertas,
todas creyeron en mi.

-6-

Te devuelvo semillas,
mirada afeminada,
talante de intelectual,
manía de jugar con otros pies,
cuidados que no distes
la cena en el restaurante chino,
el tiempo que perdí esperando.

-7-

Cuando hay dos fuerzas vitales que te impulsan (bichos romanos y tortugas) es difícil regalar árboles que no sean acacias a esos que tienen una mano gigante. Sigues entre los escombros, otros trantan de barrerlos. Cuentas las polillas y los ácaros, apuntando en tu cuaderno todo con letra ininteligible. Queda un maldito año para que los dos monstruos que aprientan pierdan su poder. Mientras tanto, con cara de excéptico andas por la calle, con el disco de Giles Corey, recordando que alguna vez el mundo fue tuyo. ¡MENTIRA NUNCA LO FUE!

viernes, 13 de febrero de 2015


Tengo un cerebro nuevo,
las caras se convirtieron en dados
las tiradas fallaron 
y  maldecí la neurociencia.
En la confusión
miré en el espejo,
borré mi imagen,
no entendí nada.

Estar bien conmigo,
renunciar a la sinapsis,
a  las neuronas espejo,
a la función vital del sistema límbico.
Estar bien conmigo,
vivir en las acacias,
clamar a amor.com,
clamar a amigos.com
Estar bien conmigo,
mientras me desfiguro
en la búsqueda de mi ser
en el anelo del olvido.

Tras este transplante, 
puede que me vaya
y me pierda
y evite la ansiedad
y no recurra más al autocontrol.
En mi cajita de excusas está el bisturí, 
para que os acordéis de que tengo otra mente
de que alguna vez  amé.

Quizás algún día no sienta,
entonces liberaré las luciérnagas
existirán cuartas o quintas partes
y mi silueta no se perderá en el fondo.
Hasta que ocurra eso solo puedo decir adiós.

domingo, 1 de febrero de 2015

Me voy a clavar bolígrafo en el pecho.  En el círculo concéntrico la tinta azúl fluye, próxima a su destrucción pactada.  Bichos, berenjenas y bebés.

Entonces bichos  romanos me cogen de la mano y me dan el último chute de mescalina. Mira pana mía, yo no soy bueno y te lo voy a explicar escribiendo al revés alguna obra de un escritor mediocre como por ejemplo Camilo José Cela. Creías en el número tres pero erraste. Vertedero de emociones, sin electricidad y bombillas.  
16/02/2014: voy a masturbarme un poquito

Salto a otra línea temporal después de correrme. Pensaba escribir sobre el verano, pero tío, no tengo ni una foto para acordarme de él. Además  nubla mi quijotera la noticia de sobredosis de pastillas y del apocalipsis entre mis piernas. Podría intentar narraros como fue no entrar en club de chinas haciendo topless o de que se siente dentro de un cine porno decadente, pero es demasiado aburrido contaros esto, además ya conocéis mis "batallitas".  Un bético siempre busca el lado cómico y cósmico de la vida.  Ahora según la estructura inicial que pacté mentalmente debería hablaros de un cultivo de berenjenas, pero tras bajar a tirar la basura y retomar el texto he decidido que es muy aburrido  y que voy a entrar de forma directa en la idea que me hizo ponerme con el puñetero teclado ( que por cierto, la letra "z" no funciona y tengo que hacer apaños). 
30/10/2014:  no sé ni a que supo tu microcoño.

Tengo que decir la verdad, poner algo reconfortante, encontrar la palabra exacta, sé que me vas leer y al hacer esto público tengo que tapar mediante silencios e imágenes la sangre pegada en el armario. Un poco de blablablá que sazone un buen plato de "papas" de almuerzo. Me abrocho las botas de nuevo  y repito la escena, pero ahora en pijama y escuchando Tom Waits. Me desabrocho las botas.  Me abrocho las botas de nuevo.  Me desabrocho las botas. Me abrocho las botas de nuevo. No entiendo de botas y tengo que volver a repetir una y otra vez como un neurótico espacial los movimientos. Ahora que me doy cuenta la suela de mis botas están un poco quemadas, menos mal que me avisaste. Podría haber elegido "La voz a ti debida" pero preferí unos calcetines con rayas porque tienen manchas de la arena de Eris. Sigo atrapado, he golpeado el móvil contra la pared para no tener la tentación de usarlo. MALDIGO LA PUÑETERA TECNOLOGÍA, lo digo mientras hipócritamente estoy contando mi vida en blogspot. Es tan dura la verdad que escondo la cabeza debajo de la arena buscando(me).
01/02/2015: ??????

Debería seguir con este texto, pero ahora mismo estoy bloqueado, demasiados pensamientos me abordan y tengo que dejarlos estamparse. Eso quiere decir que de nuevo no hay conclusión, ni estructura clara y ordenada, conexión entre puntos o que soy un fiasco como escritor.

viernes, 23 de enero de 2015

Quizás esté pringado de nuevo. La maldita culebra que nace en mi suelta sus fluídos viscosos en mis vísceras Y yo, mientras (me) observo, paseo por las escaleras. Subir y bajar. Subir y bajar. Subir y bajar. Si alguna vez parara de repetir los mismos movimientos comprendería que mi objetivo de nacer fue dominar. Impondré mi dictadura emocional del ultracapitalismo en la sede de la CNT solo cuando encuentre el bastón.

¡Oh, quimérico megalómano!
dame leche,
dame un poco de tu mente vacía,
dame  de ti,
lo necesito.

Eres un trozo de semen en un papel que  corrompió mi mundo.  Sé que tras esa fachada hay una quijotera totalmente rasurada. Fuistes un telemérico y ahora yo vivo romanticismo. Quizás algún día me de por sacar mi AK-47 y matar aquellos que hablan de quemar  libros de amor.  Habláis como si subiérais y bajárais escaleras durante todo el día. Jamás entenderé porqué no preferís entregaros al onanismo. Subir y bajar. Subir y bajar. Subir y bajar. Oh mierda me corrí,  ahora toca completar el silencio y la nada.

Cambiar miradas,
quemar algunas fotos de cuando eras bebé
encender la mecha tras 6 meses
hacer unos ejercicios de álgebra
quedarme con ustedes,
¿No entendéis el significado?
¿Queréis un poquito de fluído?
¿Necesitáis un diccionario?
defina "liostático"


Y̶̶̶ ̶̶̶a̶̶̶h̶̶̶o̶̶̶r̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶m̶̶̶e̶̶̶ ̶̶̶d̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶o̶̶̶r̶̶̶ ̶̶̶t̶̶̶o̶̶̶m̶̶̶a̶̶̶r̶̶̶ ̶̶̶u̶̶̶n̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶o̶̶̶s̶̶̶e̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶o̶̶̶s̶̶̶m̶̶̶o̶̶̶d̶̶̶e̶̶̶r̶̶̶n̶̶̶a̶̶̶

̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶N̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶t̶̶̶e̶̶̶n̶̶̶g̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶n̶̶̶i̶̶̶ ̶̶̶i̶̶̶d̶̶̶e̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶d̶̶̶e̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶o̶̶̶s̶̶̶m̶̶̶o̶̶̶d̶̶̶e̶̶̶r̶̶̶n̶̶̶i̶̶̶s̶̶̶m̶̶̶o̶̶̶

̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶T̶̶̶r̶̶̶a̶̶̶t̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶d̶̶̶e̶̶̶ ̶̶̶h̶̶̶a̶̶̶c̶̶̶e̶̶̶r̶̶̶ ̶̶̶v̶̶̶a̶̶̶n̶̶̶g̶̶̶u̶̶̶a̶̶̶r̶̶̶d̶̶̶i̶̶̶a̶̶̶,̶̶̶

̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶C̶̶̶u̶̶̶a̶̶̶l̶̶̶q̶̶̶u̶̶̶i̶̶̶e̶̶̶r̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶o̶̶̶d̶̶̶r̶̶̶í̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶e̶̶̶s̶̶̶c̶̶̶r̶̶̶i̶̶̶b̶̶̶i̶̶̶r̶̶̶ ̶̶̶a̶̶̶s̶̶̶í̶̶̶,̶̶̶ ̶̶̶e̶̶̶s̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶a̶̶̶t̶̶̶é̶̶̶t̶̶̶i̶̶̶c̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶m̶̶̶i̶̶̶ ̶̶̶i̶̶̶n̶̶̶t̶̶̶e̶̶̶n̶̶̶t̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶u̶̶̶e̶̶̶r̶̶̶i̶̶̶l̶̶̶.̶̶̶

̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶ ̶̶̶A̶̶̶d̶̶̶e̶̶̶m̶̶̶á̶̶̶s̶̶̶ ̶̶̶e̶̶̶l̶̶̶ ̶̶̶p̶̶̶o̶̶̶s̶̶̶m̶̶̶o̶̶̶r̶̶̶d̶̶̶e̶̶̶r̶̶̶n̶̶̶i̶̶̶s̶̶̶m̶̶̶o̶̶̶ ̶̶̶y̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶e̶̶̶s̶̶̶ ̶̶̶c̶̶̶o̶̶̶s̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶d̶̶̶e̶̶̶ ̶̶̶o̶̶̶t̶̶̶r̶̶̶a̶̶̶ ̶̶̶d̶̶̶é̶̶̶c̶̶̶a̶̶̶d̶̶̶a̶̶̶

Y todo esto refleja que no entiendo de roscas  y que soy el santo mesías que vino a corromperos. No quiero. No quiero. No quiero. No quiero. No quiero. No quiero. No quiero. No quiero. No quiero.  Calla puta, eres muy putita y lo sabes. Llamadme putófobo o llorón de las colinas del donut. He pisado demasiadas hormigas al caminar y ahora para mi el tiempo es una zorra ingrata. Puta. Puta. Puta. Puta. Puta. Puta. Puta. Puta. Puta. Puta. Puta. Eso me digo una y otra vez cuando en realidad quiero negar que soy el crío con la mirada perdida hacia el infinito. Sé que las máscaras venecianas no me sientan bien ¿pero acaso entiendéis de demonios internos? Yo me pongo un sombrero por seguís con eso de follar cerebros.

lunes, 19 de enero de 2015

Y se acercan los falsarios, con sus contradefiniciones, con su manía de redefinir la vida. Y yo de mientras ando por una esquina desconfiando de las supuestas técnicas comunicación que nos inocularon, de como expresar sentimientos a través de simples sonidos o combinaciones de letras. Y la muerte, el odio, el miedo, el amor, los 7 pecados capitales... Todos son exclusivamente fragmentos del yo que se intentan escapar con simples miradas y silencios.

miércoles, 14 de enero de 2015


No me dejes volver a los rincones más oscuros del alma humana. No quiero estar donde se sirve desayuno de semilla de ricino. Hace unos años tras intentar cometer el gran crimen comí las cerezas del árbol y ahora estoy sereno. Todos y todo pasaron a formar parte de la broma espacial. Recorre mi cuerpo. No existen las tablas de multiplicar luego jamás podremos realizar la división. El resto de máscaras están en el suelo quemadas. Somos ellos, la verdadera esencia del ser. Búscate. Búscame. No es mutua soledad, tampoco mutua compañía, es algo mutuo simplemente. Quedaron atrás los días de arsénico. Tengo el antídoto en la mano, pero no se lo diré a nadie. Eres la broma espacial.  Las cerezas que caducan en mutua compañía. Los rincones oscuros del alma pasaron a ser arsénico. Me buscaste para que todo fuera más sereno. Las semillas de ricino están en el suelo quemadas. La esencia del ser se va multiplicando mientras el espacio se reduce a un simple antídoto. No se lo diré a nadie. Encuentra la máscara, mientras tanto tu soledad se irá dividiendo.

En la hoguera se está descomponiendo el miedo a la muerte. A tu muerte. Jamás lo volverás a hacer, yo tampoco. Garras que oprimen. No existe un solo tú en mi vida. Tú número uno, eres patético. Tú número dos, fóllame.  Ayúdame a destruir las dualidades, tú puedes hacerlo. Ya no es un simple yo contra todo. Las terceras personas siguen ocupando su puesto de cicuta. Sé que jamás existirá un mundo (mío) en el que no esté rodeado de desconocidos. Todo se reduce a una pelea entre el tú y yo. Jamás sabremos el desenlace final de esa batalla. Pero yo solo sé una cosa, te quiero.